¿Qué momento está viviendo la biomasa en España?

Entrevista a Pepe La Cal. Ingeniero Industrial y socio fundador de BIOLIZA

 

¿Qué momento está viviendo la biomasa tanto en España como en Europa? Se está incentivando su consumo?

Yo creo que todas las medidas de mitigación del cambio climático le van a beneficiar directamente, no podemos olvidar que la biomasa es una fuente de energía cuyas emisiones de CO2 son neutras, lo que la convierte sin duda en una excelente fuente de energía primaria para combatir con las fósiles. 

En cuanto a su evolución tanto en España como en Europa, considera que es lenta pero sostenida en el tiempo, que es lo importante. La asignatura pendiente es la generación de energía eléctrica, tanto mediante combustión, como los nuevos desarrollos a través de tecnologías como la gasificación o la pirólisis, entre otras.

Me gustaría destacar la línea de incentivos al desarrollo energético sostenible de la Agencia Andaluza de la Energía, a través de la cual se incentiva el consumo de biomasa y los proyectos de generación eléctrica mediante gasificación, entre otros. Es un instrumento clave para el desarrollo del sector en Andalucía.

 A día de hoy que pros y contras tiene consumir biomasa a nivel doméstico, y a nivel industrial?

A nivel doméstico sin duda el coste que supone para el usuario final, no olvidemos que una caldera de biomasa que cumpla con la normativa de ECODISEÑO es más cara que una convencional de gas natural o de gasóleo, lo que frena su compra por parte de los particulares debido a que los plazos de recuperación de la inversión son más largos. En el ámbito industrial es diferente, donde estos períodos se acortan, además de todos los beneficios indirectos en términos de reducción de emisiones de CO2, entre otros.

Este año se está activando el consumo de orujillo, debido –dicen- a la subida del CO2, ¿Qué se espera sobre el mercado del CO2 y si esto puede hacer que se consuma más biomasa?

Es, como he comentado en los apartados anteriores, la principal palanca para el desarrollo de la biomasa en general, y del orujillo en particular. No me cabe la menor duda de que aparecerán nuevos mercados a nivel mundial porque se trata de una biomasa excelente para, por ejemplo, gasificar o para producir biochar o carbón vegetal, por citar algunos ejemplos.

La tendencia es que el precio de la tonelada de CO2 en el mercado de derechos de emisión crezca, si bien no soy capaz de predecir de qué manera. 

¿Cómo ha sido tu viaje a la India sobre la tecnología de la gasificación? ¿Qué has aprendido?

La experiencia ha sido muy positiva, tanto en el plano personal como en el profesional. Los resultados de las pruebas realizadas han sido satisfactorios, que era lo realmente importante, tanto en términos de calidad del syngas obtenido, como de funcionamiento de los motores. Una de las sorpresas, quizás la mayor por inesperada, ha sido la extraordinaria calidad del biochar obtenido, sobre todo en términos de C fijo y de PCI. Creo que la gasificación es una extraordinaria alternativa para valorizar determinadas biomasas, como el orujillo, entre otras cosas por la elevada eficiencia energética del proceso, que en el caso de las pruebas alcanzó el 71%.

A día de hoy cual es la energía renovable preferida para generar energía eléctrica?

Es una pregunta muy difícil y yo no soy objetivo, desde el punto de vista de la generación pura y dura, no de la potencia, la biomasa es la única que es gestionable y que, por tanto, puede competir con las fósiles. Ahora bien, lo ideal es tener un mix energético variado, diversificado, sostenible y competitivo, y esto se puede conseguir con todas las renovables, sin excepción. En nuestra tierra, me refiero a Jaén y a su entorno, qué duda cabe que la biomasa está llamada a ser la energía del futuro. Posiblemente la solar experimente un crecimiento importante, la hidráulica es la que es y la eólica poco va a crecer. Por tanto, me reafirmo en que la bioenergía en su conjunto, es decir, biomasa, biogás y biocarburantes, constituye la energía del futuro, sin duda alguna.